Haciendo énfasis en los freelancers o profesionales independientes), es de gran importancia que se posicionen como expertos y destaquen de los demás. No es un reto fácil, pero es necesario para construir esa anhelada credibilidad.
¿Cómo conseguir esa credibilidad, cómo sentirte más seguro de ti mismo para ofrecer tus servicios con seguridad y confianza?. Lo consigues con cuatro factores fundamentales:
1. Experiencia:
Si te vas a dedicar a un tema en particular, tu propia experiencia te da muchísima credibilidad y te ayuda a ayudar a los demás a pasar por la misma situación. Tu historia personal es clave para darte credibilidad y no te estás inventando nada, es la vida misma.
Cuando te formas como coach insisten mucho en que tu no necesitas más conocimientos o experiencia que tu clientes y es absolutamente cierto, pero a la hora de posicionarte si una persona se identifica con tu trayectoria, confiará antes en ti.
2. Formación
Obviamente, la formación te da credibilidad y genera confianza, no uses esto para empezar a formarte sin ton ni son y acumular título tras título, hasta que no tengas clientes que te paguen no serás un coach profesional por muchos títulos que tengas y sesiones gratis que des. Es importante siempre que tengas claro tu objetivo y para qué lo quieres y puedes utilizarla para aumentar tu credibilidad.
3. Especialización
Cuanto más te especialices en algo o alguien más fácil te resultará sobresalir, destacar, posicionarte y cobrar más por tus servicios. El estar especializado en un tema o en un grupo específico hace que ese grupo inmediatamente te prefiera a ti. En un mundo sobresaturado de información, la especialización es poder.
4. Prueba social
Si tienes pruebas de clientes a los que has ayudado a conseguir sus objetivos, eso te proporciona una credibilidad inmediata. Por supuesto, tu sabes lo honesto que eres o deberías ser, y que tus testimonios son totalmente reales.En este caso la experiencia, tu propia historia, está relacionada con esto porque tu también eres un testimonio, tus propios logros son pruebas.
La prueba final de que eres un buen profesional, es el haber ayudado a otras personas. Tener buenos testimonios hace que la formación pase a un segundo plano, porque lo que tus clientes potenciales quieren es que les ayudes a conseguir su objetivo, y si se lo demuestras con hechos reales no hay mejor prueba. Porque lo importante es que seas bueno en lo que haces, es la verdadera clave de todo, ser muy bueno en lo que haces. Cuando eres un buen profesional o cuando tu historia personal o tu especialización llaman la atención, te toca a ti pensar cómo aplicarlos a tu trabajo, ¿cuando vas a vas a empezar?
Con un simple ejercicio de observación podrás identificar en tu empresa u organización los diferentes errores de desperdicio empresarial, como puede ser:
1.Sobreproducción: este es el peor de los desperdicios, ya que a menudo genera otros como, transporte, movimientos e inventarios adicionales. Este se manifiesta cada vez que la producción no responde a la demanda, es decir, supone producir productos para los que no hay una necesidad por parte del cliente.
2.Tiempo de esperas: Son esperas de tiempo al recibir materiales, instrucciones de trabajo, órdenes de fabricación, inspecciones, etc. que hacen que las personas y/o las máquinas estén paradas. los lapsos sin sentido que transcurre desde la solicitud de un proyecto hasta su aprobación o rechazo por la persona encargada del departamento.
3.Transporte: Corresponde a todos aquellos movimientos innecesarios para apilar, acumular, desplazar materiales, las pautas erradas de procedimientos que llevan a sobredimensionar recorridos, a veces sin sentido ni destino correcto.
4.Procesos: Se incluyen aquellos procesos ineficientes o inútiles pero que a menudo son aceptados como imprescindibles. Por ejemplo, el proceso de ‘check-list’ de empresas de logistica puede resultar más tedioso de lo necesario.
Inventario o existencias: Constituyen un conjunto de materiales o productos que se almacenan sin una necesidad inmediata. y lo peor con periodo de caducidad, sin clientes potenciales que requiran ciertos productos.
5.Movimientos: Son movimientos improductivos, que no aportan valor al proceso; demasiado lentos o demasiado rápidos. También son posiciones o acciones innecesarias o incómodas para los trabajadores.
6.Defectos: Se asocia a los costes que suponen estos defectos en el producto o el servicio: inspecciones, reparaciones, defectos, etc. Por ejemplo, en una concessionaria asignar una van para 7 personas y entregar una para transporte de mercancias para un cliente, que había avisado de su condición al hacer la reserva.
7.Competencias: Se asocia con la asignación de tareas a personas que bien no están capacitadas para su desempeño, o bien tienen una capacitación muy superior.
En todos los procesos y en todas las áreas existen desperdicios, por lo que debemos de trabajar conjuntamente a promover la mejora continua, enfocando nuestros esfuerzos, a la identificación y eliminación de desperdicios. Una de las metodologías que te ayudara a minimizar estos desperdicios es la Metodología de las 5S