El análisis de aquellos políticos en los que el conflicto
existencial principal que plantean es la envidia del poder, quiero referirme a
dos "cualidades" específicas de los políticos: por una parte, el
carácter único de estos gobernantes (elegidos) que les confiere la cualidad de
ser auténticas obras del arte de la manipulación de las personas (electores). Y
ello porque, el significado más profundo de cada político, será distinto para
cada persona e, incluso, para la misma persona en diferentes momentos de su
vida.
El ciudadano, obtendrá significados distintos según sus
intereses y necesidades del momento, recurriendo al mismo partido político
cuando esté preparado para ampliar los viejos significados o para sustituirlos por
otros nuevos. Por otra parte, su cualidad fascinante, es, precisamente, porque
no se sabe de qué manera actúa el encanto de sus actuaciones sobre el psiquismo del ciudadano.
Esto es así, porque las experiencias y reacciones más
importantes de un ciudadano, ante los pareceres de los líderes de sus partidos
políticos, son generalmente inconscientes y permanecen hasta que éste alcance
una mayor comprensión. Luego su capacidad de ayudar al crecimiento y a la
elaboración de los conflictos, se realiza en el más absoluto secreto, pues el
ciudadano lo interpretaría como un dominio ilimitado por parte de éstos y, por
lo tanto, abrumador y contraproducente para los intereses de ese gobernante.